jueves, 25 de febrero de 2010

Comunidad de la Garnacha!

Con la mesa puesta y un desayuno inaugural de gallopinto nos reciben en la comunidad de la Garnacha!



A la bajada del autobús observo a unos niños que se dirigen hacia la escuela, y voy tras ellos. Comienza la clase, la maestra me invita a pasar y por unos momentos me siento niña.

La niña más pequeña de la clase, porque el resto son más mayores que yo. Pero no me importa, porque están todos los niños del pueblo. La maestra nos lee un cuento y después entre todos tratamos de contarlo de nuevo. No encuentro el libro, ni los lápices de colores, ni el ordenador,ni el poster en la pared, ni mi estuche Disney, no veo mis zapatillas de marca, ni mi coletero rosa... me encuentro



perdida, busco algo y no se lo

que es... La maestra pone las tareas y decido seguir mi camino...

Después de visitar una fábrica de quesos, observar el trabajo de un artesano y charlar con unos trabajadores del café... nos juntamos para ir al Mirador de Apaguaji.


Tras la comida, me despisto y el resto de la manada se va a dar un paseo, pregunto a los lugareños por el camino a seguir y decido ir tras ellos. Esta será mi primer paseo el solitario, caminando por el bosque y teniendo como guía la voz del grupo. Tras un largo paseo sola, llego a la cima y me los encuentro contemplando el paisaje y mirando hacia Honduras.


La niña que llevo dentro comienza a saltar, brincar, a subirse a los árboles hasta que se cae encima de la maleza... mientras cae intenta ver la caída desde el exterior y no puede parar de reir... le duele la barriga de tanto reirse!



Al abrir de nuevo los ojos se encuentra en el Jalacate, una galería de esculturas de piedra en plena naturaleza, que nos enseña Alberto, su creador. Nunca antes un museo me pareció tan extraordinario. Un lugar donde la cultura es arte en perfecto equilibrio y armonía con la naturaleza... un espacio mágico difícil de olvidar.

Nos despedimos de la comunidad hablando con los trabajadores.

Al llegar la noche, llegamos a Venezia, hace frío, nos albergamos en el "hotelito" y esperamos al amanecer para sorprendernos del lugar y la gente...

1 comentario:

  1. Anda que...vaya caída. Si es que es como si te estuviera viendo...Que bicha!!!

    Lo de la escuela me ha encantado. ¡¡Ojalá hubiera estado alli para ayudar a la profe!!!

    Pd: Tu nunca has tenido zapatillas de marca!

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